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viernes, 18 de agosto de 2023

Alonso de Cárdenas, hidalgo de Jábaga

 Alonso de Cárdenas se había trasladado a vivir al lugar de Jábaga, pero había nacido en Cuenca, en casa de sus padres Juan de Cárdenas y Francisca Fernández; una casa, en la calle llamada de Yuso, debajo de la iglesia de Santo Domingo. Se decía que la naturaleza de estos Cárdenas era la villa de Ocaña y se les reconocía relación familiar con el maestre de Santiago Alonso de Cárdenas. De hecho, el abuelo era García López de Cárdenas, a quien tenemos por padre del maestre de Santiago, y él mismo comendador mayor de la orden de Santiago en León, si bien los testigos reconocían que el padre Juan era hijo bastardo del citado García López de Cárdenas, aunque había llegado a Cuenca con sus armas y caballo en muestra de hidalguía

Ejecutoria de 28 de noviembre de 1532 (ACHGR, hidalguías, 301-9-18)

jueves, 3 de agosto de 2023

Los Bordallo de Cólliga

 Hernando Bordallo, hijo de Miguel Bordallo e Isabel Villanueva y nieto de Alonso Bordallo e Isabel Vélez, todos ellos vecinos del lugar de Cólliga. Por las declaraciones de testigos a los Bordallo se les asocia a los Hurtado de Mendoza, por estar a su servicio. La familia estaba extendida por otros pueblos como Arcas o Villanueva de los Escuderos


ACHGR, Hidalguías, sign. ant. 301-84-28. Ejecutoria de 1595

lunes, 31 de julio de 2023

Cruz de la iglesia de San Gil

 Cruz de Arrancacepas, corresponde a las llamadas cruces de mayo. Sin datación conocida, fue destrozada durante la Guerra Civil. Ha sido restaurada gracias al buen hacer de Dioni Triguero 




domingo, 30 de julio de 2023

JUAN DE UTANDA

 Juan de Utanda obtiene carta de emplazamiento de la Chancillería de Granada para que los concejos de la villa de Cañaveras y del lugar de Arrancacepas reconozcan su hidalguía


8 de noviembre de 1587


ARCHIVO DE LA CHANCILLERÍA DE GRANADA, HIDALGUÍAS, SIG. ANT. 304-600-289

sábado, 8 de julio de 2023

Los Herriega

 El año 1510 se conocían tres hidalgos en Valdeganga, Luis de Herriega y los hermanos Mateo y Pedro Bascuñana. Luis de Herriega, con quince años, había sido ido a servir de sacristán en Valdeganga de joven, cuando vivía aún su padre que iba a visitarle desde Albaladejo, donde la familia tenía su casa solar. La familia se había refugiado en Albaladejo, que desde comienzos de siglo estaba bajo señorío de García Ruiz de Alarcón, un bisnieto del doctor Pedro González del Castillo por la parte de su hijo bastardo el licenciado Hernán González del Castillo. Era lo que se dice hoy una familia venida a menos, pues el abuelo Sancho Sánchez de Herriega había sido caballero al servicio de los Hurtado de Mendoza, Diego y su hijo Juan, que se había establecido en Albaladejo, donde poseía la hacienda. Su hijo Luis había casado con María de Luz y otro hermano había ido a vivir a Monreal, que era lugar del marqués de Villena. A los Herriega se les conocían sus últimas aventuras militares con motivo de la guerra de Toro, desde San Juan hasta agosto (aunque la batalla es de uno de marzo de 1476), el hijo mayor de Luis de Herriega, llamado Alejo, había acudido a combatir a favor de los Reyes Católicos. De estas aventuras militares quedaban las armas y dos caballos en el hogar familiar de Albaladejo

"quando la guerra de Toro podía aver treynta años e más que viera este testigo que fuera público e notorio en el dicho lugar (de Albaladejo) como los Católicos Reyes don Fernando e doña Ysabel enviaran llamamiento al dicho lugar de Albaladejo para que los dichos hidalgos que en él vivían fuesen a servir a la dicha guerra e viera este testigo que el dicho Luis de Herriega padre del dicho Luis de Herriega porque era viejo enviara a la dicha guerra a Alejo Herriega su hijo hermano del dicho Luis de Herriega el qual fuera a la dicha guerra e estuviera en ella desde antes de San Juan de junio fasta el mes de agosto

Por aquellos años de comienzo del siglo XVI, Valdeganga era lugar en el camino que desde el sur se dirigía hacia Cuenca, a tres leguas de la ciudad y a dos de Albaladejo. Valdeganga apenas si tenía 55 vecinos en 1528; Albaladejo del Cuende, 160.


ACHGR, HIDALGUÍAS, sign. ant. 30-7-17; Luis de Herriega Sánchez. Ejecutoria de 8 de octubre de 1529

domingo, 25 de junio de 2023

Alonso Muñoz, Cañaveras

 Alonso Muñoz, vecino de la villa de Cañaveras, no vería reconocida su hidalguía en 1514, aunque los testigos recordaban como Pedro Carrillo de Mendoza, señor de la villa,  tenía en estima a su padre Pedro y quisiera hacer de él hombre exento, también se le escapaba que Pedro Muñoz era hijo de un abad y había entrado al servicio de los Carrillo como escudero durante diez años, su hijo Alonso sería mozo de espuelas. El padre y su hijo Alonso se había establecido en la villa de Cañaveras después de la guerra de Granada, se le había empadronado con los pecheros, aunque por presiones de don Diego, hijo de Pedro Carrillo, estaba exento de pechos. La suerte de Alonso Muñoz cambió cuando Luis Carrillo se convirtió en señor de la villa de Cañaveras y dio licencia al concejo para poner pechos a estos libertados de contribuir.

La genealogía de los Muñoz comenzaba con el abuelo Juan Muñoz (el abad para los testigos) casado con Catalina Muñoz su mujer, seguía con su hijo Pedro casado con Mari Muñoz y acababa con Alonso Muñoz.

Para ese año de 1514 la villa de Cañaveras presentaba una fortaleza a cargo del alcaide Juan de Salazar y era cura de la villa Diego Hernández. Estos amigos de los Muñoz fueron los que defendieron su hidalguía, denunciando que algunos testigos como Gonzalo Gómez era nieto de un judío de Palenzuela y su madre había sido azotada encima de un asno en pena impuesta por los inquisidores por hechicera y su padre tenía fama de "sastrecillo de mala muerte", o Miguel Sánchez de la Ventosa que mantenía sus odios tras ser denunciado a la Inquisición por decir que su buena cosecha de trigo no la debía a Dios sino a su buen hacer con el descanso necesario de barbecho y ser condenado a andar descalzo con un cirio negro. Pero el verdadero odio a los Muñoz, en dardos que iban contra los condes de Priego, y venían de los labradores a los que se oía decir "aguisemos tras estos hidalgos que si quedaren por hidalgos queden del todo perdidos syn bienes ningunos". Uno de esos hombres era Francisco Alcalde, aunque era morador del lugar de Olmedilla de Éliz, era hijo de un labrador de Cañaveras, Luis Hernández Alcalde, y conservaba las propiedades en este pueblo y que había llegado al pequeño lugar de Olmedilla tras morir su primera mujer; contra él poco se podía alegar de falta de limpieza de sangre, pero sí molestaba que hubiera acudido hasta la Chancillería de Granada contra los Muñoz "para limpiar su conciencia". En su empeño, le acompañaban Garci Serrano y otros tres labradores principales.


Testigo: Francisco Alcalde, pechero del lugar de Olmedilla de Éliz, 55 años


Denegación de la hidalguía a Alonso Muñoz, ACHGR, HIDALGUÍA, 304-314-2